Ilustración que muestra el complejo ambiente magnético que rodea a la Tierra. Crédito: SwRI / J. Goldstein. |
Los cuatro satélites de NASA de la misión MMS han pasado los últimos tres años estudiando la reconexión magnética (las líneas de campos magnéticos distintos se rompen y se conectan entre sí, emitiendo una gran cantidad de energía) alrededor de la Tierra. Durante la primera mitad de la misión, los satélites estudiaron la reconexión que se produce en la cara de la Tierra dirigida hacia el Sol, donde el viento solar – el flujo constante de partículas con carga eléctrica del Sol – empuja al campo magnético de la Tierra. Las dos partes que entran en contacto tienen densidades diferentes, lo que hace que la reconexión magnética se produzca asimétricamente, enviando electrones a velocidades supersónicas.
En la magnetocola, la parte de la magnetosfera que va por detrás de la Tierra debido al viento solar, sólo las líneas del campo magnético terrestre chocan, así que las partículas son aceleradas casi simétricamente.
“Por primera vez hemos observado los detalles de las regiones de disipación de la energía donde se produce la reconexión simétrica”, comenta el Dr. Roy Torbert (SwRI). “Estamos empezando a comprender la eficiencia de la emisión de energía y cómo se relaciona con nuestro ambiente”.https://observatori.uv.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario