lunes, 8 de septiembre de 2014

Signos de movimiento de placas en la luna Europa

Europa, la luna helada de Júpiter, puede albergar placas gigantes de hielo en su corteza, al igual que las placas tectónicas de la Tierra.
Según un artículo publicado en Nature Geoscience, esta actividad geológica apunta a que la superificie estaría conectada al océano que se extiende por el subsuelo, lo que supone una vía de comunicación para sales, minerales e, incluso, microbios entre el óceano y la superficie y viceversa.
Simon Kattenhorn, geólogo previamente en la Universidad de Idaho en Moscow, y Louise Prockter, científica planetaria del Laboratorio de Física Aplicada Johns Hopkins en Laurel, Maryland, hicieron el descubrimiento a través de imágenes de la nave espacial Galileo de la NASA, que orbitó Júpiter desde 1995 a 2003. La mayoría de sus imágenes de Europa son bastante borrosa, pero Kattenhorn y Prockter escudriñaron una de las pocas regiones de la luna de las que existen imágenes de alta resolución.
Trataron a las imágenes como si fueran piezas de un rompecabezas geológico gigante, con crestas y bandas y otras características que se han dividido y separados por los movimientos de la corteza, y trataron de rastrear cómo la superficie de Europa se había transformado con el tiempo.

UN TROZO DE SUPERFICIE FUE SUCCIONADO
"Cuando pusimos todas las piezas juntas de nuevo, había un gran agujero en la reconstrucción, una especie de espacio en blanco", dice Kattenhorn. La parte que falta, concluyen, debe haber sido de alguna manera succionada hacia abajo en el interior de la luna.
Kattenhorn y Prockter proponen como explicación un sistema de placas tectónicas que implica un caparazón de hielo de pocos kilómetros de espesor que resbala sobre otro de hielo más fluido. Cuando una placa choca con otra y comienza a profundizar se funde y se incorpora en el hielo subyacente.
Pero sin imágenes de alta resolución de más áreas, los investigadores no pueden decir si esta subducción también podría estar ocurriendo en otros lugares. Si resulta ser común, podría significar que la Luna podría albergar un ciclo de compuestos amigables para la vida entre la superficie y la profundidad, y que aumenta considerablemente la posibilidad de que su océano es habitable, dice Michael Bland, un científico planetario.http://www.europapress.es/ciencia

No hay comentarios:

Publicar un comentario