Un equipo de astrónomos ha señalado que a lo largo de esta semana habrá una nueva oportunidad para comprobar si el cometa Ison ha sobrevivido o si ha sucumbido definitivamente al calor del Sol. Según han apuntado, la roca debería pasar cruzando el plano orbital de la Tierra y será de fácil observación para los telescopios. La posibilidad es que 'llegue' como una leve lluvia de meteoros.
Así, han asegurado que a lo largo de los próximos días estarán observando el cielo para poder captar "cualesquiera que sean" los posibles restos dejados por Ison.
A pesar de este optimismo, la NASA ya dio por muerto, el pasado 11 de diciembre, al cometa de manera oficial después de que, el pasado 28 de noviembre tuviera su encuentro más próximo al Sol. Según explicó la agencia espacial, los datos recogidos de dicho evento detectaron una pérdida de masa de la roca antes de llegar al perihelio (el punto más cercano en la órbita de un cuerpo al Sol), lo que determina que no ha sobrevivido.
"El tamaño del núcleo de Ison podría ser como unos cinco o seis campos de fútbol. Este pequeño tamaño estaba cerca del límite de lo grande que Ison necesitaba ser para sobrevivir a su viaje alrededor del Sol", destacó uno de los expertos que llevó a cabo este trabajo, Alfred McEwen.
Además, se ha estudiado la cola de polvo del cometa para entender mejor lo que sucedió. En este sentido, las observaciones realizados por el Observatorio Solar Terrestre STEREO (NASA) y el Observatorio Solar y Heliosférico SOHO (NASA/ESA), mostraron que se produjo muy poco polvo después de que el cometa pasara por el perihelio, lo que sugiere que el núcleo del cometa ya se había roto en ese momento.
El legado de Ison
El cometa Ison fue visto por primera vez en septiembre de 2012 y era relativamente brillante para un cometa situado a una gran distancia de la estrella. Por ello, la roca se convirtió en uno de los acontecimiento del año y había grandes esperanzas de que proporcionaría un hermoso espectáculo de luz visible en el cielo nocturno. Algunos le llamaron 'el cometa del siglo'.
Si finalmente se confirma lo que la NASA ya había anunciado, no será el fin del legado de Ison. Los expertos han señalado que éste continuará durante años, ya que los científicos seguirán analizando el enorme conjunto de datos recogidos desde su descubrimiento. De hecho, la agencia espacial estadounidense ha indicado que se trata del "cometa más observado" de la historia y que los datos ahora presentados tienen "gran garantía", ya que la trayectoria del cometa ha sido seguida por satélites de diferentes agencias espaciales, así como por astrónomos aficionados.http://www.abc.es/ciencia
No hay comentarios:
Publicar un comentario