Ismael López Fournon, profesor de la Universidad de La Laguna, indicó que el hallazgo se ha producido en una zona del cielo denominada GOODS-Norte y en otras zonas ya observadas con las dos cámaras de Herschel (Spire y Pacs, en cuya construcción ha participado el IAC).
Explicó que estos son algunos de los primeros resultados del análisis de las imágenes que ha obtenido este telescopio de la Agencia Espacial Europea (ESA) y que está a 1,5 millones de kilómetros de la Tierra, en órbita alrededor de un punto en el sistema sol-tierra llamado L2.
Con las primeras imágenes los astrónomos sospechan que han encontrado una gran densidad de objetos del Universo muy lejano y al cabo de unos dos meses enviarán las publicaciones con los primeros resultados, añadió Ismael Pérez.
Los astrónomos intuyen cuál es el tipo de objetos cósmicos que se han detectado en las observaciones de Herschel al comparar las imágenes con otros estudios, pues no se parte de cero, las zonas observadas con Herschel han sido observadas anteriormente con otros telescopios, y algunas de ellas cuentan con observaciones del telescopio espacial Hubble.
El satélite Herschel, que fue lanzado al espacio el 14 de mayo del pasado año junto al satélite Planck a bordo de un cohete Ariane-5 desde la base de Kurú, en la Guayana francesa, ha obtenido datos de alta calidad, incluso mejores de lo esperado, y en pocas semanas se han detectado miles de fuentes cósmicas emisoras de luz infrarroja, comentó Ismael Pérez.
Ismael Pérez señaló que sólo con las imágenes de Herschel es difícil poder asegurar con certeza si esos objetos están lejos, en el Universo primitivo.
Los datos que proporciona Herschel se están analizando conjuntamente con los datos de las mismas zonas de cielo que se han obtenido en otros rangos como el infrarrojo cercano y medio, el visible y radio.
Además, declaró Ismael Pérez, con Herschel, que recibe el nombre del científico William Herschel, descubridor de los rayos infrarrojos en 1800, se entenderá mejor el origen del fondo cósmico infrarrojo, que se descubrió con el satélite COBE y que comenzó a estudiarse con el telescopio espacial infrarrojo Spitzer, de la NASA.
Se trata de saber de dónde procede el fondo cósmico infrarrojo, si es difuso o es debido a la suma de la emisión de galaxias infrarrojas. Los primeros resultados de Herschel apuntan a la segunda hipótesis.
Añadió Ismael Pérez que Herschel abre una ventana al estudio del Universo en el infrarrojo lejano, y señaló que el salto que supone este satélite espacial respecto a misiones similares y anteriores como Spitzer o el Observatorio Espacial Infrarrojo ISO es comparable al que se producirá en unos años al pasar de telescopios de diez metros de diámetro a los de 40 metros.
Herschel es el mayor telescopio espacial en funcionamiento y lo seguirá siendo hasta que se acabe de construir y se envíe al espacio el Telescopio Espacial James Webb, el sucesor del Hubble, dentro de unos años.
Explicó que en astronomía se habla de rangos espectrales, de diferentes tipos de luz por su longitud de onda para estudiar los objetos que hay en el Universo, de manera que se puede observar en rayos gamma, rayos X, ultravioleta, visible (que ve el ojo humano), infrarrojo, que puede ser cercano, medio y lejano, y ondas submilimétricas y de radio.
La astronomía clásica se desarrolló en el rango visible pero para estudiar longitudes de onda superiores a la millonésima de metro (una micra) es preciso utilizar telescopios e instrumentos optimizados para el infrarrojo, ya que los telescopios clásicos sólo observan en el rango desde 0.3 hasta 1 micra.
En cuanto al infrarrojo lejano, desde unas 20 hasta 400 micras, sólo se puede estudiar bien con instrumentación a bordo de aviones a gran altura (como el observatorio SOFIA, basado en un Jumbo modificado, que comenzará próximamente sus observaciones), desde globos o desde telescopios espaciales, pues la atmósfera de la Tierra absorbe la radiación en ese rango y también emite intensamente radiación infrarroja que produce un "ruido" muy alto en las observaciones.
La astronomía infrarroja desde el espacio, en el rango del infrarrojo medio y lejano, comenzó a desarrollarse en los años 80 del siglo pasado y así en 1983 la misión IRAS hizo un estudio de todo el cielo, algo que fue fundamental porque descubrió que había objetos que tenían el máximo de emisión en el infrarrojo lejano.
Se trata de galaxias del tipo ultraluminoso, que emiten mucho menos en el visible que en el infrarrojo lejano, indicó Ismael Pérez.
Además está el problema de las distancias, pues según observamos más lejos vemos el universo joven, lejos implica joven por el tiempo que tarda en llegar la luz hasta nosotros, y además la luz que nos llega aparece desplazada al rojo debido a la expansión del Universo.
En general, en el infrarrojo lejano se observan objetos muy fríos, se trata de emisión de polvo que a su vez oscurece la luz visible.
Herschel, añadió Ismael Pérez, está alejado de la Tierra porque para estudiar el Universo en el infrarrojo conviene alejarse lo más posible, pues así se evitan las radiaciones terrestres, que podrían empeorar las observaciones.
También señaló lo fascinante que es el hecho de disponer de tecnología que permite controlar un satélite espacial tan sofisticado como Herschel a tanta distancia de la Tierra. EFE
www.abc.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario