
Collage realizado por Anita* del sistema solar, donde se aprecia el sol y varios planetas.
*Anita tiene nueve años y es asidua concurrente a nuestras charlas y noches de observación
31/3/2010 de ESA
Después del descanso más profundo de la actividad solar en casi un siglo, el Sol está regresando finalmente a la vida. Pero, ¿retornará la actividad solar a sus niveles anteriores? El venerable vigilante SOHO de ESA está allí, observando y midiendo, proporcionando información única sobre la estrella que tenemos más cerca.
Aunque el Sol está regresando a la vida, no debemos de esperar demasiada actividad según Bernhard Fleck, científico del proyecto SOHO. "Pienso que nos dirigimos a una situación similar a la de principios del siglo XX cuando todo era mucho menos activo", comenta. Los registros históricos muestran que, hasta estos pocos últimos años, el ciclo solar ha sido inusualmente activo. Así que más que una caída repentina en la actividad, esto es probablemente una vuelta a la normalidad.
http://observatori.uv.es30/3/2010 de NASA
El mapa de temperatura con mayor resolución hasta la fecha y las imágenes de la helada luna Mimas de Saturno obtenidos por la nave espacial Cassini de NASA revelan formaciones sorprendentes en la superficie de la pequeña luna, incluyendo unas inesperadas regiones calientes que se asemejan a "Pac-Man" comiéndose un punto, y sorprendentes bandas de luz y oscuridad en las paredes de los cráteres.
"Sospechamos que las temperaturas reflejan diferencias en la textura de la superficie", comenta John Spencer, un miembro del equipo a cargo del espectrómetro infrarrojo de Cassini. "Esto puede ser parecido a la diferencia entre nieve vieja y densa frente a la nieve en polvo recién caída".
Fuente: http://observatori.uv.e
Los científicos han logrado, por primera vez, la colisión de haces de protones en el gran acelerador del CERN a una energía de 7 TeV (teraelectronvoltios), recreando la situación similar a los instantes posteriores al Big Bang.
Este resultado, que se obtuvo después de dos intentos fallidos, abre las puertas a una nueva fase de la física moderna, pues permitirá dar respuestas a numerosas incógnitas del Universo y la materia, según los científicos del CERN.
Un experimento histórico
El experimento que el martes 30 de marzo ha tenido lugar en la Organización Europea de Física Nuclear (CERN), y que ha podido seguirse en directo a través de Internet, abre una nueva etapa en la exploración científica que puede revolucionar la física en los próximos 20 años.
Así lo explicó Teresa Rodrigo, profesora de la Universidad de Cantabria y coordinadora de Alineamientos del CMS, uno de los cuatro detectores del Gran Colisionador de Hadrones (LHC, en sus siglas en inglés), el mayor acelerador de partículas del mundo. "No sabemos lo que vamos a encontrar, pero abre una puerta que antes no era posible imaginar", confesó Rodrigo.
Los científicos del CERN han colisionado en el LHC dos haces de protones a una energía de 7 TeV (teraelectronvoltios), un experimento nunca antes realizado, y del que se espera que dé respuesta a numerosas incógnitas del Universo y la materia. "Este es un experimento que empezó hace 20 años y que tiene 20 años más por delante, y hoy estamos en el inicio de esa nueva era. Es una nueva etapa de la exploración científica extraordinariamente excitante", señaló Rodrigo.
La causa de tanto regocijo es el hecho de que por primera vez se ha conseguido colisionar partículas a una energía, y por tanto, a una velocidad, nunca antes logradas, lo que permitirá desentrañar muchas de las incógnitas de la materia.
"Esperamos que los grandes descubrimientos surjan en dos o tres años, pero desde las primeras colisiones se obtienen datos que para los científicos ya son muy gratificantes", explicó María Cruz Fouz, investigadora del CIMAT y coordinadora del grupo de Caracterización del detector de Muones del CMS.
Un proceso que hay que repetir
Los haces de protones han circulado a una velocidad de 7 TeV, después de haber "viajado" y colisionado con éxito a velocidades menores. 7 TeV es la mitad de la potencia calculada del acelerador, una capacidad máxima a la que sólo será sometido después de se haya revisado minuciosamente todo el engranaje y se haya reconfigurado para adaptarse a una velocidad de 14 TeV. Las colisiones a 7 TeV se repetirán al menos un año y medio.
"Algunos sucesos son muy probables y otros no, por eso hay que repetir los choques muchas veces, para dar la oportunidad a los que suceden menos a menudo", explicó Fouz.
Los científicos calculan que los resultados de los actuales experimentos y los que se desarrollen en los próximos años podrán usarse durante dos décadas, no sólo por toda la información y descubrimientos que aportarán, sino por la lentitud y dificultad de la creación de nueva tecnología.
"El rango de energías a la que comenzaremos a trabajar hoy es crítico, nos permitirá descubrir por ejemplo, el famoso bosón de Higgs, la partícula que queda por descubrir en el modelo estándar de la física", explicó Alcaraz. El teórico bosón de Higgs -aún no demostrado empíricamente- es el responsable de que el resto de partículas tengan masa, y tiene el nombre del científico que hace 30 años predijo su realidad.
Para intentar descubrir el supuesto bosón y otras nuevas partículas, se han recreado las condiciones de los instantes posteriores al Big Bang, cuando se creó el Universo. "A 7 TeV estamos muy cerca de las condiciones de materia y energía justo después de la creación de universo. Cuando estemos a 14 TeV estaremos aún más cerca de ese momento inicial", afirmaba Rodrigo.
"No vamos a hacer nada que no ocurra en el universo, los rayos cósmicos lo hacen todos los días, pero lo que hacemos aquí es recrearlo de forma controlada y con una alta probabilidad de que veamos los sucesos", aclaró Fouz.
Fuente: www.20minutos.es
29/3/2010 de NASA
Los responsables de NASA han dado el via libre para el lanzamiento del transbordador Discovery el próximo 5 de abril, en la misión STS-131 a la Estación Espacial Internacional. Después de un día entero de reunión del comité de revisión de viabilidad del lanzamiento, no quedó ninguna cuestión pendiente que pueda impedir que el Discovery y su tripulación realicen una misión segura y con éxito.
Los especialsitas suelen fijarse en una huella característica de la luz emitida por el hidrógeno, denominada línea Lyman-alfa, para estudiar la cantidad de astros formados en el universo muy distante. Pero gran parte de esa luz precisamente queda atrapada en la propia galaxia, en el polvo y el gas interestelar, de manera que no llega a los telescopios y la galaxia no se ve.
"Los astrónomo siempre supieron que les faltaba una fracción de las galaxias en los sondeos Lyman-alfa, pero ahora, por primera vez, tenemos una medida concreta, y la cantidad de galaxias que se estaba perdiendo es enorme", comenta Matthew Hayes (Universidad de Ginebra), autor principal de la investigación, en un comunicado del Observatorio Europeo Austral (ESO). Los resultados del trabajo, en el que ha participado el español J.Miguel Mas-Hesse, del Instituto de Astrobiología (CSIC-INTA), se publican en la revista Nature.
Lo que han hecho estos astrónomos es, primero, observar una zona concreta del cielo, denominada GOODS-Sur, con un filtro especial colocado en la cámara Fors (de luz visible) de uno de los cuatro telescopios VLT, con espejo principal de 8,2 metros de diámetro cada uno, propiedad del ESO. En este primer sondeo se han centrado en la tradicional línea Lyman-alfa. Después han utilizado otra cámara, la nueva Hawk-I (infrarrojo cercano), de otro de los VLT, para explorar la misma zona del cielo pero centrándose en una diferente huella de luz, la línea H-Alfa, también emitida por el hidrógeno, y han comparado los resultados. Se han centrado en galaxias que están a 10.000 millones de años luz (desplazamiento al rojo de 2,2).
Con esta estrategia, Hayes y sus colegas han demostrado que las observaciones que utilizan sólo la tradicional línea Lyman-alfa pierden una gran parte (hasta el 90%) del total de luz emitida en el universo profundo. "Ahora que sabemos cuánta luz hemos pasado por alto, podemos comenzar a crear representaciones del cosmos muchos más precisas, entendiendo mejor la velocidad con que se formaron las estrellas en las diferentes épocas de la vida del universo", ha comentado Mas-Hesse.
www.elpais.com
Según la teoría de la Relatividad General de Einstein, si un rayo de luz pasa cerca de un objeto masivo, su trayectoria se curva hacia él. Si la luz procede de una galaxia, la forma de esta se distorsiona por el efecto llamado de lente gravitacional débil, y su estudio proporciona información sobre la distribución de la masa que produjo la distorsión, aunque sea una masa de materia oscura que no brille como las estrellas. Además, las distorsiones dependen de la distancia y ésta, a su vez, de si la expansión del universo es acelerada o no.
Además de las mil horas de observación realizadas con el Hubble (de la NASA y la Agencia Europea del Espacio, ESA), los astrónomos han determinado las distancias a 194.000 galaxias -de las 446.000 del sondeo llamado Cosmos- gracias a los análisis de su luz hechos con telescopios instalados en tierra. Tim Scharabback (Universidad de Leiden, Holanda) y sus colegas dan a conocer el estudio en la revista Astronomy and Astrophysics. "El número de galaxias incluidas en este tipo de análisis no tiene precedente, pero lo más importante es la riqueza de la información que podemos obtener acerca de las estructuras invisibles del universo", explica unos de los autores del trabajo, Patrick Simon (Universidad de Edimburgo).
La llamada energía oscura, cuyo descubrimiento sorprendió a todos hace algo más de una década, sería una misteriosa fuerza de repulsión por la que la expansión del universo a partir del Big Bang no se ralentiza con el tiempo, sino que se acelera. Nadie lo sabe explicar, pero su efecto es enorme, hasta el punto de que los cálculos más detallados, realizados con los datos del satélite WMAP, indican que el 72% de todo lo que existe es energía oscura, el 23% es materia oscura y sólo el 5% del universo es materia corriente26/3/2010 de Hubble site
Realice un estimulante paseo por la nebulosa de Orión, una enorme fábrica de estrellas a 1500 años-luz de distancia. Baje en picado por el cañón gigante de gas y polvo de Orión. Vuele por estrellas gigantescas cuya luz brillante ilumina y aporta energía a la región entera de la nube. Pase como un rayo por objetos con forma de renacuajo que son sistemas solares en ciernes.
Este viaje espacial virtual no es el último videojuego, sino una de las varias visualizaciones astronómicas de última generación creadas por especialistas del Space Telescope Science Institute (STScI) de Baltimore, el centro de operaciones científicas del telescopio espacial Hubble. Las odiseas espaciales cinemáticas forman parte del nuevo film Imax "Hubble 3D", que se está estrenando en cines de todo el mundo.
http://observatori.uv.es/25/3/2010 de UC Berkeley
Los científicos afirman que en Júpiter la lluvia de helio es el mejor modo de explicar la escasez de neon en las capas exteriores del planeta, el mayor del sistema solar. El neon se disuelve en las gotas de helio y cae hacia el interior donde se redisuelve, vaciando así las capas superiores de ambos elementos, tal como se observa.
http://observatori.uv.es
Al contrario de la experiencia acumulada por las agencias espaciales norteamericanas y europeas, la Jaxa, encargada de organizar y realizar el programa de exploración interplanetaria de Japón, tiene tan sólo siete años de vida.
Creada en 2003 para ordenar de mejor manera los planes espaciales nipones -desarrollados hasta entonces por la Agencia de Aeronaútica-, su trabajo fue mucho más allá, dando frutos de manera rápida y sorprendente: en 2008, con su sonda lunar Selene, lograron crear el mapa más detallado hasta hoy de la Luna, además de recolectar información sobre el nacimiento y origen de nuestro satélite.
Y si bien su exploración espacial se ha centrado casi por completo en el acompañante de la Tierra, en mayo, Jaxa está lista para dar su próximo gran salto: su primera misión interplanetaria para investigar a uno de los llamados "postergados": el planeta Venus.
La sonda Akatsuki -también conocida como Planet-C- es una misión no sólo importante por su aporte científico, sino porque se convertirá en la mejor carta de presentación del país asiático frente a la nueva carrera espacial, donde EE.UU. ha frenado la marcha, cediendo lugar a otros actores, como China e India, y donde Japón apenas se asomaba.
Más de 230 mil japoneses inscribieron su nombre y un mensaje que portará Akatsuki en una placa metálica cuando parta el 18 de mayo próximo.
Además de este recuerdo, el equipo viene cargado con seis instrumentos de medición: cinco cámaras específicas para medir distintas variables como la temperatura, la radiación o simplemente tomar imágenes, y un oscilador destinado a medir los cambios en la atmósfera del segundo planeta más cercano al sol.
El estudio de Venus, según los miembros de Jaxa es muy importante, porque al menos en tamaño y forma, Venus y la Tierra son planetas muy similares, pero con condiciones en el entorno muy diferentes: Venus, posee temperaturas superiores a los 460 grados Celsius y un 95% de dióxido de carbono en su atmósfera, el que, a su vez, posee una velocidad de rotación 60 veces mayor que la del mismo planeta.
Estos enigmas son los que intentarán ser descifrados durante los cuatro años y medio que durará la misión (dos alrededor del planeta), que llegará a Venus recién en diciembre de este año.
La sonda también tendrá la tarea de comprobar y ahondar en los resultados obtenidos por el Venus Express, la sonda europea enviada el 2006 destinada a conocer la superfifice del planeta. Se espera que Akatsuki pueda fotografiar la actividad eléctrica que ocurre en Venus -ya que la existencia de rayos y relámpagos sólo ha podido ser comprobada con medidores, pero no a través de imágenes. Y por cierto, saber con certeza si alguna vez en Venus hubo algún océano como se especula.
El cohete H-IIA que lanzará al espacio a la sonda Akatsuki también será la responsable de enviar al espacio al proyecto Ikaros, que tal como el mito griego que le da su nombre, su objetivo será volar lo más cerca posible del sol.
Esto, porque Ikaros es un experimento para demostrar hasta qué punto la utilización de paneles solares puede servir para disminuir o reemplazar el uso de combustible en las naves y así alargar su tiempo de vida útil. La idea de esto es impulsar una misión a Júpiter en la próxima década.
La agencia también posee otros proyectos que bien podrían considerarse dentro de una película de ciencia ficción. El más interesante es el de crear un "elevador espacial", un sistema que permita levantar naves, tripulaciones y materiales a una altura cercana a los 36 mil kilómetros de altura, desde donde sea posible realizar lanzamientos, utilizando menos energía por la menor acción de la gravedad.
También se está trabajando en el proyecto Hayabusa, el cual ya cumplió su primera etapa y que pretende, en el corto plazo, colocar un robot sobre un asteroide para lograr desviarlo.
Fuente: http://www.latercera.comTriste destino el del jinete, que debe saltar de los ferrocarriles a los fotones y de éstos a las estrellas con europio y cerio en su superficie. Aunque él crea que sí, así nunca encontrará la Verdad que anda buscando
Por Leonardo Moledo–¿Quiere que le diga una cosa? Me da vergüenza, pero igual...
–A ver...
–Se me borró la primera parte de este diálogo y ahora estoy tan preocupado que ni sé dónde estábamos.
–Estábamos con las estrellas que, por alguna razón, cambian su composición química superficial.
–Bueno, pero antes digamos que usted es astrofísico, director del Instituto de Ciencias Astronómicas de la Tierra y del Espacio, y que va a participar en el Workshop “Orígenes del Universo y de Vida” el 25 de marzo. La jornada se llevará a cabo en el Palacio San Martín y contará con el apoyo del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto y de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).
–Efectivamente.
–Bueno, y ahora sí: usted estudia: estrellas que tienen elementos raros en lugares raros.
–Cuidado con eso, porque no es que el objeto tenga más cromo o europio. El cromo o el europio están igual que en el Sol, pero suben.
–¿Por qué?
–Esas estrellas, que son muy estables, rotan muy lentamente y algunos iones se van para arriba y otros se hunden, por un efecto que se llama difusión. La teoría de la difusión hace que la gravedad tire hacia abajo algunos iones y otros, que también son tirados por la gravedad hacia abajo, absorben una radiación de tal manera que son empujados hacia arriba. Esos iones son cromo, europio... Esas estrellas son muy particulares, y desde la década del 40 se vienen estudiando en Argentina.
–¿Y qué se estudia de esas estrellas? Porque cuando voy cabalgando por el campo y miro las estrellas, a lo mejor estoy viendo una de ésas.
–¿Puedo hacer una pregunta yo?
–Adelante.
–¿Qué busca cabalgando tanto entre temas tan diferentes?
–Si lo supiera... Tal vez la Verdad, así con mayúscula.
–No pide poco usted..., pero volviendo a las estrellas, a estas estrellas anómalas... Lo primero que se intenta es determinar por qué esas estrellas tienen esos efectos y otras estrellas no. De ahí se fue descubriendo que estas estrellas eran muy estables (es decir, que rotaban muy lentamente) y que de ahí provenía el efecto de difusión. Otra cosa: no en cualquier temperatura se puede producir el efecto, sino que se produce en las que están en el orden de los 10 mil grados de temperatura superficial (el Sol tiene 3 mil y ahí no se produce). Tercero: no se produce en estrellas donde la radiación se transfiera por convección. La convección es el mismo mecanismo por el cual usamos las estufas: burbujas de gas más calientes del interior de la estrella se intercambian con las que están afuera. Cuando esto sucede, todo se mezcla, por lo cual no hay estratificación de ningún ion, todos los iones están mezclados. También se descubrió que para formar una estrella de cromo o de estroncio se necesita un cierto período de tiempo, porque el proceso de movimiento de los iones es lento.
–¿Cuán lento?
–Se necesitan 100 millones de años para lograr tener una estrella de silicio, por ejemplo.
–No es poco...
–No... Y en cien millones de años va a seguir buscando la Verdad.
–No voy a durar tanto.
–Bueno... En última instancia, con nuestro trabajo le agregamos granitos de arena a la respuesta a las preguntas fundamentales: de dónde venimos, quiénes somos y hacia dónde vamos. Tratamos de determinar cómo se forman estos objetos, por qué evolucionan, como evolucionan, por qué el universo tiene en nuestra galaxia ese objeto, mientras que en las nubes de Magallanes (las dos pequeñas galaxias satélites de la Vía Láctea) no... En realidad, en las nubes de Magallanes los encontramos, pero las nubes tienen una metalicidad diferente. Los astrofísicos le llaman metalicidad a todo lo que no sea hidrógeno y helio. Las nubes de Magallanes tienen una metalicidad mayor que la galaxia nuestra: ahora se está estudiando de qué manera influye esa metalicidad en el proceso de formación de estrellas.
–¿Qué telescopios se usan?
–Nosotros tenemos acceso fuertemente a un telescopio del orden del metro cincuenta, dos metros. Y ahora, con el Gémini (consorcio de siete países que manejan un telescopio en Hawai y uno en el norte chileno), tenemos acceso a un telescopio de 8 metros unas 18 noches al año. Argentina aporta al proyecto el 2,5 del presupuesto y tiene derecho a usarlo el 2,5 por ciento del tiempo.
–En la parte que se borró, usted me hablaba de los cúmulos abiertos. ¿Qué son? ¿Qué relación tienen con estas estrellas?
–Bueno, los cúmulos abiertos también se caracterizan por poder tener objetos anómalos. Algunos los tienen y otros no. Hay cúmulos abiertos que tienen muchísimos objetos químicamente peculiares y hay otros que no tienen nada. Por qué ocurre esto es algo que no sabemos.
–¿Y por qué cree que pasa eso?
–Yo creo que es un problema evolutivo, donde intervienen los campos magnéticos. Todavía no está bien estudiado en astrofísica. Sabemos que tienen influencia, pero todavía no hay una teoría comúnmente aceptada de cómo influyen en la evolución estelar. Sí sabemos cómo influye el campo magnético en el Sol.
–A ver...
–Bueno, el Sol no tiene un gran campo magnético, pero su actividad está fuertemente regulada por ese campo. La Tierra está recibiendo continuamente una lluvia de partículas cargadas del Sol. Cuando hay una tormenta solar aparecen problemas en las comunicaciones... Eso ocurre en un planeta como el nuestro, que no sabemos si es un planeta típico porque no tenemos con qué compararlo porque es el único sistema que conocemos a fondo. La astronomía atraviesa una etapa de estudio de sistemas solares fuera del nuestro. Se están estudiando las estrellas centrales de esos sistemas, para ver si son similares al sol.
–¿Y son como el Sol?
–Hay algunas que son como el Sol, hay otras que son distintas (un poco más calientes o un poco más frías). Inclusive los planetas que rotan alrededor de esas estrellas solares son diferentes al nuestro...
–Pero esos son los que se ven...
–Claro. Pero el satélite Kepler, ahora, está descubriendo muchos planetas terrestres.
–¿Cómo hace?
–Si mal no recuerdo, funciona observando el cambio de brillo de la estrella central. Cuando pasa el planeta delante de la estrella central, el Kepler detecta el eclipse.
–¿Y qué más se puede saber de esos planetas terrestres, además de que están?
–Ah, para eso hay que ir. Y para poder ir hay que aumentar la velocidad. Nosotros llegamos a 40 mil, 50 mil kilómetros por hora. Tenemos que llegar a eso, pero por segundo. Si llegáramos a esa velocidad, habría voluntarios que aceptarían hacer viajes a las estrellas más cercanas.
–¿No estamos fantaseando un poco ahí?
–No. Se presentarían voluntarios, como se presentaron voluntarios para todas las misiones experimentales (como, por ejemplo, qué es lo que pasa en gravedad cero desde hacer el amor hasta comer de determinada manera). O ir a Marte...
–Pero ir a Marte es una cosa; ir a Alfa del Centauro es salir del sistema solar... Es otra cosa.
–Sí, es cierto, pero yo creo que es una inversión de dinero.
–Yo creo que hay una cuestión cultural también...
–Bueno, pero es similar a cuando Colón se lanzó a su aventura, porque terminó yendo hacia lo desconocido. Y creo que en el ser humano subsiste ese espíritu aventurero, ese afán por conocer. Imagínese el impacto que tendrían estas investigaciones, no sólo para la astronomía. Encontrar una mísera bacteria fuera de la Tierra traería una verdadera conmoción a la filosofía, a la religión, a la sociología. Pero todavía no hay nada de eso. Lo más parecido fueron las larvas de 380 micrones, similares a las larvas fosilizadas encontradas en el meteorito que cayó desde Marte en la Antártida. Pero el asunto es que ese fue descubierto 13 mil años después de estar enterrado en la Antártida, entonces no se puede asegurar que esas larvas sean marcianas. No es un meteorito fresco.
–Estamos muy en el principio de la exploración espacial, ¿no?
–Sí. In situ se ha llegado a la Luna y nada más, aunque hay sondas y rastreos que fueron muchísimo más lejos. No se olvide del proyecto SETI, que tiene la misión de detectar señales que provengan del espacio. Ahora el vicepresidente de Microsoft hizo una donación muy importante de radiotelescopios que reactiva el proyecto. Se revisarán cerca de un millón de estrellas. Estos radiotelescopios son capaces de detectar cualquier emisión que provenga de una civilización inteligente que tenga radiotelescopios. Si se toma la ecuación de Frank Drake y se pone en optimista le da más o menos un millón en nuestra galaxia; si se pone pesimista, le da 10 mil...
–Y siendo muy pesimista da una.
–Es que las otras fracciones deben tener algún valor distinto de cero. Podrían tener cero, pero si fuera así el proceso que dio origen a la vida sobre la superficie terrestre habría sido único, lo cual es increíble, aun teniendo en cuenta las dos opciones que hay en este momento. Una es que la vida vino de afuera. Esta teoría se ha reactivado mucho en los últimos tiempos, porque parece ser que hay gente que ha detectado que hace 3 mil millones de años hubo como seis o siete impactos de meteoritos grandes, del orden de 50 kilómetros de diámetro. La otra es que se ha generado en la propia Tierra. De cualquier maneras, es muy difícil pensar que el proceso haya sido exclusivo de nuestro ínfimo planeta. Hay que buscar lugares donde el agua no se evapore ni se congele.
–Pero también está el asunto de que la búsqueda de vida está basada en el carbono, cuando en realidad podría haber vida basada en el silicio, por ejemplo.
–Hay una teoría que postula que el silicio también podría ser un transmisor de la vida. Porque en el caso terrestre, el agua es lo que transporta la vida. Por eso es importante ver qué pasó en Marte, porque en Marte hay vestigios de que hubo agua en grandes cantidades y que, por alguna razón, desapareció. Tal vez el Marte actual sea una imagen del futuro de la Tierra. La mayor parte de la gente que trabaja en estas cosas cree que hay vida en otros lugares.
–Es una creencia.
–Sí. Pero una creencia muy razonable.
–Y que yo comparto absolutamente.
Informe: Javier Vidal.
http://www.pagina12.com.ar/diario/ciencia/
Nuevas imágenes térmicas obtenidas con el telescopio Very Large Telescope de ESO y otros potentes telescopios instalados en Tierra muestra remolinos de aire más cálido y regiones más frías en la Gran Mancha Roja de Júpiter que no habían sido observados hasta ahora, permitiendo a los científicos realizar el primer mapa meteorológico detallado de interior del gigantesco sistema tormentoso, relacionando su temperatura, vientos, presión y composición con su color.
Las observaciones revelan que el color más rojo de la Gran Mancha corresponde al núcleo templado dentro de lo que es un sistema tormentoso frío, y la imagen muestra bandas oscuras en los bordes de la tormenta donde los gases descienden a las regiones más profundas del planeta. Las observaciones proporcionan a los científicos detalles sobre el comportamiento de la circulación dentro de la tormenta mejor conocida de nuestro sistema solar.
Fuente : http://observatori.uv.es/
Al calentar el hidrógeno a temperaturas cada vez más altas, pierde energía por radiación a una velocidad cada vez mayor, Si la temperatura sigue aumentando, los átomos de hidrógeno pierden sus electrones, dejando que los núcleos desnudos choquen unos contra otros y se fundan. Esta fusión produce energía, Si la temperatura sigue subiendo, la cantidad de energía producida por fusión es cada vez mayor.
La cantidad de energía producida por la fusión aumenta más deprisa con la temperatura que la pérdida de energía por radiación. Al alcanzar cierta temperatura crítica, la energía producida por la fusión llega a ser igual a la perdida por radiación. En ese momento la temperatura se estabiliza y la reacción de fusión se automantiene. Con tal de suministrar hidrógeno al sistema, éste producirá energía a un ritmo constante.
La temperatura requerida varía con el tipo de hidrógeno. El tipo más común es el hidrógeno (H) con un núcleo compuesto por un solo protón. Después está el hidrógeno pesado, o deuterio (D), con un núcleo compuesto por un protón y un neutrón, y el hidrógeno radiactivo, o tritio (T), con un núcleo de un protón y dos neutrones.
La cantidad de energía producida por fusión nuclear a una temperatura dada con D es mayor que con H y menor que con T.
Las fusiones con H producen tan poca energía que haría falta una temperatura de más de mil millones de grados para mantener la reacción en el laboratorio. Es cierto que lo que se funde en el centro del Sol, donde la temperatura alcanza sólo los 15.000.000 de grados, es H, pero a una temperatura tan baja sólo se funde una proporción diminuta del hidrógeno. Sin embargo, la cantidad de H que hay en el Sol es tan ingente que aun esa diminuta proporción basta para mantener la radiación solar.
La fusión que menos temperatura requiere para iniciarse es la de T: basta unos cuantos millones de grados. Desgraciadamente el tritio es inestable y apenas se da en la naturaleza. Habría que formarlo en el laboratorio casi por encargo, y aun así sería imposible mantener a base de tritio la cantidad de reacciones de fusión que necesita la Tierra.
La fusión del deuterio tiene una temperatura de ignición de 400.000.000º C. El deuterio es estable pero raro; sólo un átomo de cada 6.700 es de deuterio. Pero tampoco exageremos. En un litro de agua ordinaria hay suficiente deuterio para producir por fusión una energía equivalente a la combustión de 67 litros de gasolina.
Un modo de alcanzar la temperatura necesaria es mediante la adición de algo de tritio para que actúe de detonador. La fusión de deuterio con tritio puede iniciarse a los 45.000.000º C. Si se logra prender un poco de la mezcla, el resto se calentaría lo suficiente para que el deuterio pudiese arder él solo.
El tiempo que hay que mantener la temperatura depende de la densidad del hidrógeno. Cuantos más átomos por centímetro cúbico, tantas más colisiones y más rápida la ignición. Si hay 1015 átomos por centímetro cúbico (una diezmilésima del número de moléculas por centímetro cúbico del aire normal), la temperatura habría que mantenerla durante dos segundos.
Claro está que cuanto mayor es la densidad y más alta la temperatura, tanto más difícil es mantener el deuterio en su sitio, incluso durante ese tiempo tan breve. Los sistemas de fusión han ido avanzando poco a poco durante todos estos años, pero aún no se han conseguido las condiciones para la ignición.
Si el clima ayuda, esta noche se podrá ver a Saturno a simple vista. Y no es una ocasión para desperdiciar, ya que el famoso planeta de los anillos estará nada más que a 1.272 millones de kilómetros de la Tierra. No parece poco, pero lo cierto es que no volverá a estar tan cerca hasta el 2026.
Saturno se encontrará esta noche en oposición, es decir, diametralmente opuesto al Sol en el cielo, alineándose ambos con la Tierra. Se lo podrá apreciar a simple vista, como un brillante punto de luz ligeramente amarilla. Asomará por el Este apenas pasadas las 19 y, con el correr de las horas, ganará altura en el cielo hasta culminar en dirección norte, ya pasada la medianoche.
Las oposiciones de Saturno ocurren una vez cada 378 días, pero como las órbitas de la Tierra y el gigante gaseoso no son circulares (sino elípticas, como las de todos los demás planetas), las distancias entre ambos varían apreciablemente en cada una de esas oportunidades. Esta vez estarán a 1.272 millones de kilómetros, una distancia imposible de imaginar para cualquier persona, pero no vovlerán a estar tan cerca hasta dentro de 16 años.
Saturno es el sexto planeta del Sistema Solar, el segundo en tamaño y masa después de Júpiter, y forma parte de los denominados planetas exteriores o gaseosos. Es quizás el más popular de los cuerpos celestes gracias a sus sistema de anillos, descubiertos por Galileo Galilei en 1610, aunque la poca definición de su telescopio lo engañó: el astrónomo y filósofo italiano creyó entonces que se trataba de grandes lunas. Distintos astrónomos y científicos terminaron por confirmar que Saturno estaba rodeado de anillos.
A Saturno le lleva bastante más tiempo que a la Tierra dar la vuelta al Sol: el periodo de traslación del planeta de los anillos es de 29 años y 167 días. Pero su período sinódico es de 378 días, de manera que cada año la oposición con la Tierra se produce con casi dos semanas de retraso respecto al año anterior.
http://www.lacapital.com.ar/
Profesionales y astrónomos aficionados, educadores y todos los entusiastas de la astronomía en todo el mundo están invitados a celebrar el Universo en abril de 2010, durante el Mes Mundial de la Astronomía – un proyecto internacional que se basa en los logros del Año Internacional de la Astronomía 2009, mediante la combinación de una amplia gama de actividades con la posibilidad de compartir experiencias en tiempo real!
El éxito sin precedentes de 100 Horas de Astronomía (100 ha) en abril de 2009 demostró lo que podía ser realizado por un muy motivado y con energía de la comunidad internacional de gente apasionada, creando entusiasmo aún mayor para un seguimiento de la experiencia. Como un reto, ya que puede ser seguir el éxito histórico de 100 ha, los astrónomos sin Fronteras (AWB) ha puesto el listón aún más alto, invitando a los entusiastas de la astronomía en todo el mundo para celebrar el Universo por todo un mes!
Teniendo lugar en abril de 2010, el Mes Mundial de la Astronomía (GAM2010) es una comunidad basada en el esfuerzo destinado a lograr la colaboración internacional y una mayor interacción entre los participantes que nunca antes. La idea principal de GAM2010 es compartir ideas, experiencias y éxitos, que las comunidades que organizan sus propios eventos para llevar a sus ideas e inspiración a seguir.
“La alegría de reunir a la gente de todos los países independientemente de su edad, raza o creencias – todos impresionados por las maravillas del Universo – es algo que siempre sobrevivirá el Año Internacional de la Astronomía 2009 (IYA2009)”, dice Mike Simmons, Presidente de AWB y co-presidente del esfuerzo de la 2009 100 ha. “GAM2010 se basará en que la pasión y la energía, a partir de una idea simple y la construcción de un proyecto global, multiplicando su efecto, ya que se va. Al igual que 100 horas de Astronomía, GAM será un movimiento social en la comunidad de la astronomía “
Con todo un mes disponible, los organizadores del evento GAM2010 tienen cuatro ventajas sobre 100 ha en 2009: 1) la capacidad para planificar eventos en los mejores tiempos en sus países, 2) el tiempo de reprogramar la intemperie afectadas eventos al aire libre, 3) más maneras de involucrar a los participantes y el público con una gama más amplia de proyectos y actividades, y 4) la oportunidad de ser inspirada por – y ser la inspiración para – compañeros de entusiastas de la astronomía en todo el mundo.