La noche del jueves se presento con nubosidad que poco a poco fue desapareciendo gracias a una brisa fuerte que comenzó a soplar desde el sudoeste, gracias e eso, Laura y Adrián venidos de la ciudad de Tandil especialmente para visitarnos pudieron observar entre otras cosas el planeta Júpiter y los denominados satélites galilianos.
Entre observación y observación fuimos intentando contarle nuestras experiencias con distintos telescopios y monturas a Adrián ya que él esta interesado en adquirir un tele. Es de destacar que estos amigos ya venían con una idea clarísima de lo que quieren por lo que se nos facilito la tarea.
Si bien ya no estaba el cielo cubierto, la brisa ya amenazaba con ser viento por lo que aceleramos la observación buscando objetos muy vistos por los miembros del grupo, pero que siempre sorprende a las visitas como por ejemplo La Tarántula en la Nube Mayor de Magallanes o los cúmulos globulares como NGC 6397 en Ara o NGC 6441 en Escorpio.
Como Laura quiso saber los nombres de los satélites, hicimos una captura de pantalla recreando la posición de cada satélite tal cual los vimos.
Cuando Orión se elevo totalmente sobre el horizonte, fue el momento de la despedida de nuestros amigos y de otra noche interesante como casi siempre son estas noches de Jueves de Reunión.
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Después de tantos jueves nublados y tormentosos que nos negaban la visita al observatorio al fin amaneció como un día prometedor, previo contacto con Daniel vía SMS emprendimos con Laura un viaje que seria nuestra primera observación con un telescopio! (solo habíamos observado Andrómeda con un par de binoculares pequeños (10x25)). A unos 10km de Tandil una fuerte tormenta eléctrica empañaba nuestras ilusiones y por teléfono nos avisaban que cerca de azul las nubes descargaban piedras, pero estábamos decididos a llegar con la esperanza de que la brisa que describía Sergio se transforme en viento. Previa charla sobre monturas y modelos de telescopios abrimos la cúpula y Sergio orientó el refractor hacia el objeto más brillante de la noche..y como era el día de Júpiter se nos presento nítidamente con sus 4 satélites naturales...lo había visto previamente en cientos de fotos y videos pero nada se compara con observarlo a través del ocular...fue un momento de esos que duran toda la vida...más tarde llego Marcela que me enseño algunas constelaciones y luego Cristian para compartir otras observaciones...les quiero agradecer mucho el recibimiento y prometemos empanadas para la próxima! Buenos cielos a todos y seguimos en contacto! Saludos, Adrián
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