Noche de observacion

Dos en la noche
Viernes 4/2/11

Cuando no hay luna es la mejor condición para observar y si llega la invitación de ir al campo, uno tiene que estar preparado para salir inmediatamente si gusta de esta actividad. Tarde en salir lo que me llevo cargar el móvil y verificar que no me olvidaba nada.
Ya en tránsito hacia la zona de ver, admirar, y confraternizar se notaba que el cielo estaba muy lindo, muy limpio, producto de las lluvia del jueves, también ayudaba que estaba el aire frío.
Salio Gerardo de Loma y pico en punta al paraje que estamos yendo últimamente. Recién allí nos saludamos de paso ya que lo primero es lo primero, armar todo para observar.
El par de contratiempo para él fue olvidarse el contrapeso de su montura binocular y quedarse corto con el abrigo. Los mío es que la linterna roja estaba intermitente y la vista bajoneada por un torrontés que prepare para la vuelta. Fue un toque, pero el ojo derecho lo acuso. En fin, así somos, che. Aficionados!
Ya en observadores, vimos en simultáneo (en los dos teles) NGC 4945, en Centauro. Galaxia de fácil observación para teles como los nuestros por su tamaño, 20’ x 4, su inclinación hacia nosotros de 43 grados y su magnitud de 8,6. Se le suma a esto que entra en el campo visual del ocular la estrella SAO 223870 de magnitud 5 visible a simple vista sobre el fondo oscuro de esa bonita zona.

Luego de chocarnos por así decirlo con Omega Centauri, impactante como siempre fuimos por el cúmulo globular NGC 5286 de mg 7.4. También es fácil de hallar porque está pegado a la estrella SAO 241157 mg 4.7 y muy cerca de epsilon Centauro mg 2.6.
Ver el cúmulo junto a la estrella me recordó a otro globular, a NGC 6388 en Scorpio, pero este pose una tonalidad blancuzca común a la mayoría de los globulares, mientras que 6388 tiene un distintivo tono bronce producto de la de la estrella roja SAO 228167 que entra en el mismo campo de visión.

Pegando un lindo salto, caímos en NGC 5808, cúmulo globular en Carina en los límite con Musca. Este se presenta muy brillante y compacto sobre un fondo negro que lo hace merecedor de volverlo a ver. Es como Tucana pero más pequeño. Si bien su magnitud de 6.2 facilita encontrarlo, su tamaño no tanto. Claro que con una carta y dando dos o tres pasos se llega. Yo salí de SAO 236808 (Turais) mg 2.2 en la falsa cruz. Tal vez saliendo de alpha Volantis mg 4.2 sea más sencillo. Es cuestión de gusto y de cielo, ya que alpha Volantis con cielo de ciudad, casi no se ve mientras que el cúmulo si puede ser bien visto.

Mientras el reloj seguía corriendo también vimos pasar incontables satélites, aviones, un par de gauchos que se pararon a ver si necesitábamos algo (es gracioso decir que no con los ojos bien cerrado para no ser encandilados), cuatro bólidos saliendo de Corvus en dirección de la Gran Nube de Magallanes con un intervalo de un par de minutos entre uno y el siguiente. Un murciélago pichón en vuelo de prueba (creo que reboto el examen) y algún que otro mosquito con abrigo (ya hacia bastante frío).

Hasta ahí fue todo en simultaneo, luego cada uno se tomo un subte distinto. Se oyó decir en vos baja como si de estaciones se tratara, “Triplete”, “M86”, “M1”, “Saturno”, “Orión”, o direcciones como cinco mil ciento veintiocho Dto A o que se yo.
Si si… nos dicen que estamos locos, pero nosotros decimos que no, que solos somos “particulares”.

Los teles: Hokken y Casero
Los usuarios: Gerardo y Sergio.
Los móviles: VW, Fiat, Nokia, aprender, pasarla bien.
Informe Sergio Bais
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