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Bajo un cielo muy adecuado para la observación astronómica producto que el polvo en suspensión frecuente en la zona, no se suma a la contaminación lumínica de la ciudad gracias a las frecuentes lluvias de verano nos reunimos como todos los jueves parte de los integrantes del Grupo GOCO para observar mediante el telescopio de la identidad diversos objetos celestes. Por suerte, esta noche nos vinieron a visitar una familia deseosa de saber de que se trata esto de la astronomía amateur. Así que les fuimos contando de las distintas actividades que desarrollamos tanto en nuestra sede como fuera de ella. Le hablamos de nuestras constantes salidas al campo, de nuestras ruedas de mate cuando el cielo esta nublado, del recibimientos de escuelas y jardines de infantes con fines didácticos, así también como viajes a encuentros y congresos de aficionados por todo el país.
Entre respuestas a preguntas que fueron surgiendo en la amena charla, fuimos llegando al momento de ver por el telescopio. Les mostramos la luna con su cara iluminada en un 50% que revelaba en todos su esplendor su característico relieve, luego, tras identificar a las “Tres Marías” enfocamos la Nube de Orión donde les marcamos la diferencia entre ver el sector a simple vista, a bajos aumentos (por el buscador) y luego a través del tele en los distintos aumentos que permite. Sin mover la cúpula observaron la diferencia de color en las estrella Betelgeuse (roja) y Sirio (azul) y siguiendo con el tema colores, pasamos a la hermosa binaria que se integran justamente por una estrella roja y una azul, la llamada Albireo de invierno por los astrónomo del hemisferio norte en el Can Mayor.
Casi en el final del pequeñísimo viaje celeste, giramos la cúpula y nos fuimos en busca de Eta Carinae sin dejar de hablar en ningún momento de astronomía pues como ya se dijo, la familia integrada por Silvia, Agustín, Mario, Norma y Darío realmente están movilizadas por el tema.
Cuando la garganta empezó a flaquear en el guía y las obligaciones futuras llamaban al descanso a las visitas, finalizamos el paseo con la observación de NGC 2808, un destacado cúmulo globular en Carina, dejando la promesa de mostrarles en visitas futuras, Omega Centauri.
Claro que la noche no termino ahí. Gerardo y Marcela iniciaron una series de observaciones de cúmulos abiertos en Carina y Cruz, algunos de ellos muy bonitos por los distintos “dibujos” que forman las estrellas como así también la combinación de colores que los distinguen. También como era de esperar, Gerardo intento algo más difícil desde la ciudad, busco y halló con la ayuda de cartas celestes una Nebulosa Planetaria en Carina, se trató de Blue Planetary (NGC3918) fácilmente identificable en el Cassegrain del Grupo. Una vez centrada en el campo del ocular, revelo su forma oval muy compacta con un color azul muy destacable sobre el fondo estelar.
Luego de este éxito, fue, esta vez acompañado por Sergio, en busca de otra planetaria pero ahora en la constelación de Musca aprovechado las excelentes condiciones del cielo. Este objeto a diferencia del anterior se mostró muy distinto. Este NGC 5189 de magnitud 10.3 se ve como una pequeña nubosidad tenue que tiende a disgregarse. Es interesante ver el contraste que causa SAO 252366, una estrella de magnitud 7.2. que se aprecia en el mismo campo de visión.
Un poco cansados decidimos concluir dando final a una noche muy muy provechosa tanto en la difusión de la actividad como la practica de la misma.
Esta noche actuaron:
Como los entusiastas preguntones:
Ostertag: Silvia, Agustín, Mario y Norma más Fischer Darío.
La Guía en cúmulos abiertos: Marcela
El Guía en objetos exóticos: Gerardo
Portero, guía de turno y mal guionista: Sergio
Fotografía: Falto el actorleer mas
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